El BOE recoge hoy un decreto que establece que será Soraya Sáenz de Santamaría, y no Luis de Guindos, quien se encargará de despachar y firmar el reparto de las cantidades destinadas a financiar el bono social de las eléctricas. El ministro de Economía y Competitividad en funciones, que asumió las funciones de Industria, Energía y Turismo tras la salida de Soria, no puede participar en este proceso puesto que, hasta su nombramiento, fue consejero de Endesa.

Esta es la tercera vez que De Guindos da un paso atrás en la toma de este tipo de decisiones desde que asumió las competencias. En junio, cedió a la Vicepresidenta del Gobierno la gestión de la orden de redistribución de las empresas distribuidoras de energía eléctrica y, en julio, la de los valores de retribución a la distribución.

Luis de Guindos asumió las competencias del Ministerio de Industria, Energía y Turismo tras la salida de Soria, ahora propuesto por el Gobierno para ocupar un alto cargo en el Banco Mundial. El problema es que su vinculación con la compañía provoca un conflicto de interés a la hora de regular o tomar decisiones sobre eléctricas. Lo que no sabemos es si esta situación a afectado a otras decisiones o asuntos a tratar en el ministerio adoptado por el ministro en funciones.

El decreto establece que, de mediar en la orden, incumpliría la ley del alto cargo, que establece que hay conflicto de interés si afecta a “entidades privadas a las que el alto cargo haya estado vinculado por una relación laboral o profesional de cualquier tipo en los dos años anteriores al nombramiento”. Luis de Guindos fue consejero hasta diciembre de 2011.

Pese a estar en funciones y, por lo tanto, ejercer un mandato limitado -no pueden presentar presupuestos ni otro tipo de leyes ni decisiones que afecten al siguiente, el Gobierno sí puede ejercer, según la ley, el despacho ordinario de los asuntos públicos, como este reparto de porcentajes para financiar el bono social.

De Guindos no es el único ministro de este Gobierno que se ha abstenido en una decisión por conflicto de interés. Pedro Morenés, Ministro de Defensa, tuvo que dar un paso atrás en las negociaciones de compra de nuevas fragatas por su relación con una empresa de misiles.

Buenos días.

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