• Es hija de un expresidente del propio Tribunal de Cuentas
  • El BOE corrige hoy el nombramiento para aclarar que la decisión no fue unánime.
  • Ejercía como directora de Relaciones Institucionales en el organismo en los años en los que se le acusa de presidir la empresa en Panamá.

En abril de este año, la directora general de Economía y Sector Público del Ayuntamiento de Madrid se vio obligada a dimitir tras la publicación de una noticia en OK Diario que apuntaba que presidió una sociedad off-shore en Panamá durante cinco años. Pero no estuvo mucho tiempo sin ocupar otro puesto en lo público. Poco después, en julio, el Tribunal de Cuentas, donde ya había ejercido cargos en épocas anteriores -estaba en comisión de servicios-, nombró a Marta Fernández-Pirla asesora técnica.

Hoy, el BOE recoge una curiosa corrección de errores de su nombramiento. No se trata de un simple fallo tipográfico. Si el nombramiento original rezaba que había sido nombrada por la Comisión de Gobierno “por unanimidad”, en la corrección se elimina esa expresión. La decisión, pues, no fue unánime.

La Comisión está formada por tres personas: el presidente del Tribunal de Cuentas, Ramón Álvarez de Miranda; el presidente de la Sección de Enjuiciamiento, Felipe García, nombrado consejero a propuesta del PSOE; y el presidente de la Sección de Fiscalización, a la que se adscribe el cargo de Fernández-Pirla, Javier Medina, nombrado consejero a propuesta del PP.

Si tenemos en cuenta que es difícil aprobar una decisión así sin el visto bueno del presidente y que la funcionaria va a trabajar bajo las órdenes de Medina, todo apunta a que el voto contrario podría haber venido de parte de Felipe García.

De vuelta al Tribunal de Cuentas

Cuando saltó la noticia de su aparición en los Papeles de Panamá, los medios se centraron en su trabajo en el Ayuntamiento -nombrada en 2013 por Ana Botella y mantenida en su puesto en 2015 por Manuela Carmena- y su puesto como catedrática interina en la Universidad Complutense de Madrid. Lo que no se contó entonces es que también había ocupado cargos en el Tribunal de Cuentas y que, además, si la información de OK Diario es correcta, simultaneó la presidencia de esa empresa off-shore en Panamá con su cargo público.

Marta Fernández-Pirla pertenece al Cuerpo Superior de Auditores del Tribunal de Cuentas desde que en 1995 aprobó la oposición. Empezó a trabajar en la entidad como directora de programas, unos años después de que su padre, José María Fernández Pirla, hubiera sido consejero y presidente del organismo. Con el tiempo, fue ascendiendo y ocupando diferentes puestos de responsabilidad. De hecho, uno de esos cambios de puestos, la orden de adjudicación de su plaza como subdirectora adjunta en 1998 vía libre designación, incluye también el nombramiento de Ramón Álvarez de Miranda, actual presidente del Tribunal de Cuentas, como, por entonces, subdirector técnico.

Con el tiempo, llegó a ser directora de Relaciones Institucionales en dos ocasiones: de 2000 a 2003 y de 2010 a 2013. Según la información y los documentos publicados en abril y que no aparece en su currículo oficial, fue presidenta de de Jurican Pacific Finance & Investment Real Estate entre 2007 y 2012. Si es así, simultaneó su cargo en el Tribunal de Cuentas con la presidencia de una sociedad off-shore.

Esta no sería la primera vez que una polémica sobre nombramientos empaña la imagen del Tribunal de Cuentas. En 2014, El País desveló que un centenar de trabajadores de la entidad tenían lazos familiares con sus máximos responsables.

Como directora general de Economía y Sector Público del Ayuntamiento de Madrid, Fernández-Pirla cobraba 85.526 euros anuales, según la Relación de Puesto de Trabajo (RPT) del Consistorio. En su nuevo puesto, según los datos de Hacienda y de la RPT del Tribunal de Cuentas, cobra 65.537 euros anuales más trienos.

Buenos días.

div class=”nota” markdown=”1”>

Actualización

Desde el Tribunal de Cuentas aseguran que ha vuelto a trabajar en la entidad porque estaba en comisión de servicios. La ley establece que “a los funcionarios en comisión de servicios se les reservará el puesto de trabajo y percibirán la totalidad de sus retribuciones con cargo a los créditos incluidos en los programas en que figuren dotados los puestos de trabajo que realmente desempeñan”. Ante las preguntas sobre quién se opuso al nombramiento, responden que esas deliberaciones son “secretas” y, ante las preguntas sobre qué opina el Tribunal de tener una empleada que podría haber presidido cuentas en una sociedad offshore mientras ejercía allí, aseguran que no suelen “emitir valoraciones”. Aun así, quedamos a la espera de una respuesta que, por el momento, no llega. </div>

Déjanos decirte algo…

En esta información, y en todo lo que puedes leer en Civio.es, ponemos todo el conocimiento acumulado de años investigando lo público, lo que nos afecta a todos y todas. Desde la sociedad civil, 100% independientes y sin ánimo de lucro. Sin escatimar en tiempo ni esfuerzo. Solo porque alguien tiene que hacerlo.

Si podemos informar así, y que cualquiera pueda acceder sin coste, sin barreras y sin anunciantes es porque detrás de Civio hay personas comprometidas con el periodismo útil, vigilante y al servicio de la sociedad en que creemos, y que nos gustaría seguir haciendo. Pero, para eso, necesitamos más personas comprometidas que nos lean. Necesitamos socios y socias. Únete hoy a un proyecto del que sentir orgullo.

Podrás deducirte hasta un 80% de tu aportación y cancelar cuando quieras.

¿Aún no es el momento? Apúntate a nuestro boletín gratuito.