Un día como hoy, pero hace exactamente diez años, el BOE recogía la creación de cinco fundaciones. Una de ellas tiene entre sus fines “contribuir a la mejora de la calidad democrática en nuestro país mediante el recurso a la tecnología, la comunicación, la investigación y el desarrollo”. Lo que viene a ser un poco de todo. Por si acaso. Lo que no se sabía, por entonces, es en qué se iba a convertir Civio, que hoy acoge, entre muchísimas otras investigaciones y proyectos, este artículo que están leyendo.

Por entonces, ese 23 de febrero de 2012, no existía El BOE nuestro de cada día (el proyecto nació en octubre). Por eso, porque no pude contarlo entonces, me tomo la licencia de contarlo ahora. Y celebrarlo. Porque tiene mérito, diantres.

El BOE, ese día, salió con error. La primera vez que aparece el nombre de David Cabo, nuestro ahora director, le llaman Calvo. Y mira que tiene pelazo. No pidieron corrección de errores por eso de no molestar. Y es que una de las cosas que caracteriza a Civio es que no nos andamos con pequeñeces ni simbolismos: o vamos a lo grande, a fondo, a liarla, o no vamos.

También aparece en ese documento nuestro presidente, Jacobo Elosua. Y el dinero que tuvieron que poner ambos, en plan descerebrados, para arrancar la cosa: 48.000 euros de su bolsillo. Y nuestros primeros patronos, que confiaron, a ciegas, en algo que aún no era.

Sobrevivir diez años, intentando ser de verdad independientes y sin recurrir a titulares facilones, clickbait (excepto el de este artículo, claro) y dinero comprometedor que nos alejara de nuestros principios ya es para celebrar. Pero lo mejor es que en todo este tiempo hemos hecho, aún siendo muy pocos, muchísimas cosas. De verdad. Efectivas. Sin rodeos. Y da mucho gustico.

Es la única vez que, aunque de forma muy indirecta, algo de mí salió en el BOE, aunque por entonces aún no lo supiera. Porque si salgo directamente, ya saben, igual implosiona todo.

Buenos días y gracias por estar ahí (especialmente a nuestr@s queridísim@s soci@s).

Déjanos decirte algo…

En esta información, y en todo lo que puedes leer en Civio.es, ponemos todo el conocimiento acumulado de años investigando lo público, lo que nos afecta a todos y todas. Desde la sociedad civil, 100% independientes y sin ánimo de lucro. Sin escatimar en tiempo ni esfuerzo. Solo porque alguien tiene que hacerlo.

Si podemos informar así, y que cualquiera pueda acceder sin coste, sin barreras y sin anunciantes es porque detrás de Civio hay personas comprometidas con el periodismo útil, vigilante y al servicio de la sociedad en que creemos, y que nos gustaría seguir haciendo. Pero, para eso, necesitamos más personas comprometidas que nos lean. Necesitamos socios y socias. Únete hoy a un proyecto del que sentir orgullo.

Podrás deducirte hasta un 80% de tu aportación y cancelar cuando quieras.

¿Aún no es el momento? Apúntate a nuestro boletín gratuito.