La confianza se demuestra con método

Hola,

Hace poco te hablamos de confianza. Hoy queremos ser más prácticos. Hoy queremos enseñarte el método que hay detrás de esa confianza. Y lo que cuesta sostenerlo de verdad.

Porque en Civio, la independencia no es solo una palabra bonita. Es una forma de trabajar aplicada al periodismo y al tipo de sociedad que queremos. Y mantener ese estándar tiene un coste que queremos que conozcas.

No tenemos un gran presupuesto, pero tenemos una obsesión: llegar hasta el final cuando lo público se resiste. Y eso, en términos económicos y de recursos, implica asumir unos compromisos que otros no se pueden permitir.

Significa asumir un esfuerzo jurídico que otros evitan.

Cualquiera puede publicar una nota de prensa. Firmar un manifiesto. Publicar un hilo en X que quizá se haga viral y se comparta mucho. Nosotros nos dedicamos a otra cosa.

Abrir el algoritmo BOSCO no fue una intuición ni un golpe de suerte. Fueron 7 años de recursos, apelaciones y condenas en costas. De esperas y de incertidumbre. De “noes” del Gobierno y de la Audiencia Nacional. De ser tenaces y no desistir hasta que el Tribunal Supremo nos dio la razón. Y lo que abre esa sentencia no es solo un precedente legal: es un camino que aún estamos recorriendo.

Es solo una prueba más de que nuestro método funciona. Por eso también lo estamos aplicando para conocer los asesores opacos de las administraciones, los precios secretos pactados con farmacéuticas o quién está comprando vivienda protegida a la SAREB.

Pero hacerlo requiere una inversión de tiempo y dinero que es posible gracias a los socios y socias que se comprometen a nuestro lado.

Nuestro método también significa invertir en investigaciones de largo recorrido. Y hacerlo con rigor.

Cuando investigamos el uso de la Inteligencia Artificial en la sanidad pública, y los riesgos de la falta de control, dedicamos meses enteros de varios miembros del equipo solo para mapear lo que nadie veía. Encontramos 150 sistemas automatizados, y seguimos tirando del hilo.

Por desgracia, eso no es gratis. Alguien tiene que sostenerlo. Son nóminas de especialistas dedicadas a no darte un titular fácil, sino una radiografía precisa que antes no existía. Contar lo público con precisión técnica es parte del método. Y requiere estabilidad y recursos suficientes.

Pero, seguramente, el coste más alto es el de la libertad.

Ser independientes significa no ir detrás de subvenciones, patrocinios o publicidad de las administraciones a las que fiscalizamos. Significa decir “no” a las vías de financiación que mantienen a otros medios y organizaciones. Y renunciamos a esos ingresos garantizados para que nadie pueda levantar un teléfono y pedirnos que “suavicemos” una investigación o que desistamos de ir a juicio. Porque lo hacen.

¿Por qué te contamos esto? Porque a veces, desde fuera, parece que Civio funciona solo. Que las victorias judiciales caen del cielo, que las grandes investigaciones se hacen solas y que las herramientas ciudadanas simplemente “ocurren”. Y no ocurren. Se financian.

Este método funciona. Lo hemos demostrado. Un método —paciente, técnico, ético— que es pura inteligencia cívica: capacidad colectiva para usar datos, tecnología, periodismo y acción legal, y ponerlos al servicio de la ciudadanía.

Pero es un método que exige sostén, no aplausos. Exige continuidad. Exige que haya una comunidad que lo haga posible y que nos dé margen para afrontar investigaciones largas y procesos judiciales complejos.

Y aquí entras tú.

2026 será un año clave: con la transparencia en grave retroceso, más juicios abiertos, más algoritmos usándose —con poco o ningún control— en lo público, leyes y reformas importantes que vigilar y más decisiones opacas que explicar con rigor quirúrgico.

Necesitamos más pulmón para afrontarlo —sin renunciar a nada: ni a método, ni a independencia, ni a ambición—. Por eso necesitamos aumentar nuestra base de socios y socias.

Si valoras este método y quieres que exista con toda su fuerza:

👉 Únete ahora y haz posible este trabajo.

No por afinidad.
No por simpatía.
Por responsabilidad e inteligencia cívica.

Gracias por apreciar el valor de lo que hacemos.

El equipo de Civio