Ejecución del gasto público, el gran punto ciego de la información presupuestaria del Estado
España muestra unos pobres resultados en la Encuesta de Presupuesto Abierto 2019, que evalúa la calidad de su información presupuestaria en términos de transparencia, participación y vigilancia.
En 2019 la International Budget Partnership (IBP), una organización internacional que promueve la transparencia presupuestaria, seleccionó a Civio como organización experta independiente para evaluar la calidad de la información presupuestaria del Gobierno de España en un contexto global a través de la Encuesta de Presupuesto Abierto 2019.
Esta encuesta evalúa la información proporcionada en todo el ciclo presupuestario, incluyendo el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado, el presupuesto aprobado por el Congreso de los Diputados, la ejecución de dichos presupuestos, las auditorías que lleven a cabo organismos independientes y, si los hay, los mecanismos de participación de los ciudadanos y la información que se les ofrece.
Hoy queremos compartir los resultados, que reflejan una serie de valoraciones que requieren la atención de nuestros representantes públicos. Los principales son:
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En transparencia de la información presupuestaria, España tiene una puntuación de 53 sobre 100 y se sitúa en la posición 45 de una clasificación de 117 países, entre Turquía y Ghana. La falta de detalle de los informes de ejecución presupuestaria es una de las causas de esta valoración.
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En participación pública en las distintas etapas del proceso presupuestario, España tiene una puntuación de 2 sobre 100. Existe una grave carencia de mecanismos piloto para involucrar a la sociedad civil y a la ciudadanía en la formulación del presupuesto y el monitoreo de su implementación.
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En cuanto a vigilancia presupuestaria, las Cortes Generales de España proporcionan una supervisión limitada durante la fase de planificación del ciclo presupuestario y una vigilancia débil durante la fase de implementación.
Aquí puedes leer los resultados en detalle. Se basan en un cuestionario detallado de 145 preguntas que hemos respondido aportando argumentos y enlaces en cada una de ellas y que, además, para reforzar la precisión de la evaluación, ha sido revisado y anotado después por un experto independiente anónimo (designado por la IBP) y, lo más importante, por un técnico del Ministerio de Hacienda, que puede indicar si está de acuerdo o no con nuestras respuestas. Aquí puedes leer este cuestionario, en inglés.
La clave: el escaso desglose de los datos
Los resultados de esta encuesta reflejan algo que, al menos para nosotros, no es novedad: el Estado debe mejorar la calidad y la granularidad de la información sobre la ejecución de los presupuestos. Se trata de una medida que hace años que pedimos tanto al Ejecutivo como a los principales partidos cada vez que preparan sus programas.
Actualmente, los informes mensuales publicados por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) no permiten comparar fácilmente la ejecución por programa y organismo respecto al presupuesto aprobado porque tienen un nivel de desglose inferior y una estructura diferente a la de los Presupuestos. Esto dificulta la rendición de cuentas en torno a los presupuestos e impide a la sociedad civil y a la ciudadanía en general conocer y exigir transparencia sobre desvíos presupuestarios. Por ejemplo, los del Ministerio de Defensa, que todos los años gasta millones por encima de lo presupuesto, muchas veces mediante partidas “sin tipificar”.
Por eso, hoy hemos enviado también una carta al Ministerio de Hacienda para informarle de estos resultados, insistir en la necesidad de mejorar la calidad y el detalle de los datos de ejecución del gasto público y solicitar un reunión. Aquí puedes leerla. Entretanto, seguiremos tratando de mejorar el conocimiento y la comprensión de la información presupuestaria a través de iniciativas como Dónde van mis impuestos y formaciones como estas:
– Cómo entender los presupuestos, por David Cabo.
– Cómo encontrar historias en los presupuestos, por Miguel Ángel Gavilanes.